Querido 2016:

¡Menudo año! Empezando por enero y acabando por Diciembre. Los 365 días, las 8.760 horas y los 525.600 minutos. 

Año par y bonito donde los haya. Bonito por dentro y fuera, pero sobre todo por dentro. Por dentro porque ha sido el año que más lecciones me ha dado y en el que más he aprendido. Por dentro porque me ha hecho crecer como persona. Por dentro porque me ha roto en cachitos para luego recoger solamente los imprescindibles. Por dentro porque, ahora mismo, a día uno de enero de 2017, soy feliz. 

Y es que he aprendido que la felicidad, no depende de nadie, sólo de mí. 

Que puedes ser la persona más feliz del mundo aunque llores y tengas malos ratos. 

Que la felicidad no es un estado de ánimo, es un estado del ser. 

Que la felicidad se puede construir con pequeños detalles y grandes acciones.

El 2016 me ha enseñado a dar amor y a dejarlo entrar. Me ha enseñado que si das, tarde o temprano, recibes (a veces por triplicado) y que quien te quiere, te lo demuestra. 

El 2016 me ha regalado personas increíbles. Algunas ya estaban y otras han llegado nuevas (y espero que se queden). Personas con las que he reído hasta llorar, con las que he compartido lágrimas y abrazos, con las que he cantado a grito pelado, con las que he compartido mi inolvidable verano, con las que he sufrido las clases y los exámenes, con las que he sentido cosas preciosas. Personas de verdad, de las que necesito en mi vida. 

El 2016 me ha traído grandes proyectos que espero, en 2017, se desarrollen. 

El 2016 me ha creado nuevas metas y nuevos sueños. Sueños enormes. Gigantes. Que a veces veo difíciles de conseguir, pero el 2016 también me ha enseñado que lo imposible sólo cuesta un poco más y que si amas lo que haces y cómo lo haces, conseguirás alcanzarlos. 

Para terminar, gracias. Gracias a mi familia, por estar siempre al pie del cañón, luchando. 
Gracias a todas las personas que han formado parte de mi 2016. Que me han dedicado su tiempo, que me han enseñado, que me han sacado sonrisas, que han bailado conmigo, que me quieren, que se preocupan por mí, que me han hecho soñar... Gracias. 

Y gracias a ti, por cuidarme y enseñarme que el amor, existe. 

Mis mejores deseos para el 2017 (y gracias por acompañarme en este nuevo proyecto, en el próximo post, más moda, belleza y lifestyle) 💘